GitHub ha llevado a Copilot a otro nivel, y lo ha hecho de la mano de GPT-4. La nueva versión del asistente para programadores, llamada Copilot X, ha incorporado la última inteligencia artificial de OpenAI, así como un chatbot al estilo ChatGPT con soporte para texto y voz.
Copilot X ya no solo ayuda a programar, sino que también responde a las dudas de los desarrolladores, analizando las líneas de código, las pull requests, la documentación del software o el proyecto en el que se esté trabajando. Según explicó Thomas Dohmke, CEO de GitHub, Copilot X se integra de forma nativa tanto al entorno de desarrollo integrado (IDE) Visual Studio, como al editor de código fuente VS Code.
La herramienta al estilo ChatGPT de Copilot X promete cambiar drásticamente la interacción de los programadores con el código. No solo se trata de una ventana de chat, sino que también reconoce qué código ha escrito el desarrollador, qué mensajes de error se muestran y está profundamente integrado en el IDE. Un desarrollador puede obtener un análisis detallado y explicaciones de lo que se pretende que hagan los bloques de código, generar pruebas unitarias e incluso obtener soluciones propuestas para los errores.
La incorporación de GitHub Copilot Voice es otra gran novedad. Esta función permite a los programadores realizar acciones utilizando su voz, lo que facilita aún más su trabajo. Copilot X pretende aprovechar GPT-4 para mucho más que para sugerir código. También permitirá tener un entendimiento más sencillo del software sobre el que se trabaja, permitiendo explorar su documentación, incluso si es limitada.
La otra gran característica en la que Copilot X pretende sacarle mucho provecho son las pull requests. La inteligencia artificial añade etiquetas automáticas en las descripciones de los pedidos de revisión de cambios que realizan los programadores antes de fusionar su código a una rama. Pero la idea de GitHub es potenciar todavía más esta función de cara al futuro. Más adelante, por ejemplo, Copilot X sugerirá automáticamente oraciones y párrafos a los programadores cuando creen nuevas pull requests, y también generará advertencias cuando detecte que no se realizaron suficientes pruebas sobre ellas.
Por último, GitHub llevará Copilot a la terminal. Esto será de la mano de Copilot CLI, donde la inteligencia artificial será capaz de componer comandos y bucles, entre otras características.
Desde su lanzamiento, Copilot ha sido utilizado por más de 1 millón de programadores y ha escrito el 46 % del código en la plataforma. Aunque también ha quedado en el centro de la polémica por “robar” el trabajo de otros desarrolladores. Quedará por verse qué impacto logra el nuevo Copilot X, pero todo apunta a que elevará la experiencia unos cuantos escalones.
En resumen, GitHub ha llevado a Copilot a otro nivel con la incorporación de GPT-4 y el chatbot al estilo ChatGPT. Copilot X no solo ayuda a programar, sino que también responde a las dudas de los desarrolladores, analizando las líneas de código, las pull requests y la documentación del software o el proyecto en el que se esté trabajando. La incorporación de Copilot Voice y la potenciación de la función de pull requests son otras grandes características que prometen mejorar significativamente la experiencia de los desarrolladores. Sin embargo, cabe mencionar que, como toda tecnología emergente, Copilot X también puede plantear algunos desafíos y dilemas éticos. La cuestión de la propiedad intelectual, la responsabilidad de los desarrolladores sobre su propio trabajo y la transparencia en el uso de la inteligencia artificial son solo algunos de los temas que deberán abordarse en el futuro cercano. Sin embargo, con una adopción tan rápida y amplia como la que ha tenido Copilot, queda claro que la herramienta se ha convertido en un elemento fundamental del entorno de programación moderno y que su evolución seguirá dando que hablar en el futuro.
Fuente: hipertextual.com